jueves, 29 de enero de 2009

La Casa de las Ciencias

La Casa de las Ciencias de A Coruña, una de las más importantes de España, ha reabierto sus puertas esta semana después de una reforma que ha costado 600.000 euros, merece la pena acercarse, además la entrada es gratuita durante unos días!!

La primera planta de la Casa de las Ciencias estuvo ocupada desde sus inicios por módulos interactivos sobre experiencias del mundo de la Física. Algunos de aquellos módulos, como el que abordaba la experiencia de Arquímedes, el que mostraba el uso de poleas para levantar pesos, o la gran instalación en la que se representaban diversas formas de conversión de la energía constituían ya elementos emblemáticos del centro.

Ahora, la sala ha sido renovada en su práctica totalidad, dando paso a nuevos módulos que descubrirán a los visitantes muchos otros procesos que funcionan en nuestra vida cotidiana y que en ocasiones no son fáciles de comprender. El diseño industrial y la realización de los doce nuevos módulos de esta sección ha sido realizado por el Exploratorium de San Francisco (EEUU), museo de ciencia interactivo de referencia mundial.

Si bien la estética de los módulos es diferente, la filosofía se mantiene, y en esta sala lo importante no son las respuestas, sino el hacerse preguntas y experimentar. Los doce nuevos módulos permiten jugar con películas y pompas de jabón, con el sonido, la gravedad, el aire o la luz con actividades que permiten a visitante tocar y experimentar cada aplicación.

La segunda planta de la Casa de las Ciencias está destinada a presentar exposiciones temporales. En esta ocasión se reabre con una exposición sobre que celebra el Año Internacional de la Rana. La muestra contiene una selección de ranas, sapos y otros anfibios vivos de diferentes partes del mundo, alojados en terrarios acondicionados a sus características.

Forman parte de esta selección la rana toro africana, una de las ranas más grandes que se pueden tener en cautividad; la salamandra tigre, originaria de América del Norte; el tritón de vientre rojo, de China; la rana dardo, original de las selvas tropicales americanas y con una variada y vistosa gama de colores en su piel; el sapo hoja, con dos curiosas prominencias encima de los ojos a modo de cuernos que les permite camuflarse en la hojarasca de bosques de Malasia; el sapo pantera, que puede encontrarse en los oasis del Sahara; el sapillo pintojo, una especie con el hocico puntiagudo; la rana verde arborícola de Australia; y el sapito vientre de fuego, típica de los estanques, arrozales y riberas de ríos de Asia.

Los anfibios constituyen un eslabón muy importante en la cadena trófica, ya que son consumidores de insectos y a su vez constituyen la dieta de muchos animales. Son fundamentales como parte de la biodiversidad del planeta; las secreciones de su piel orientan a los científicos sobre nuevos fármacos para producir analgésicos, antibióticos y tratamientos para muchas enfermedades. Más de una tercera parte de los anfibios del mundo están en peligro de extinción; en los últimos 25 años desaparecieron más de 100 especies.

0 comentarios: